La Generación Z busca autenticidad, diversión y marcas que hablen su idioma. En un mercado de golosinas altamente competitivo como el de Estados Unidos, Colombina necesitaba una propuesta fresca y relevante que captara la atención de este público exigente. Chewzme nació para ser más que una golosina: una marca cómplice de los jóvenes que buscan experiencias llenas de sabor y actitud.
Reto: Conectar con una audiencia exigente
Nuestro desafío consistió en definir la personalidad de la marca y desarrollar un tono de comunicación que la diferenciara en un entorno saturado. Necesitábamos desarrollar una identidad que no solo vendiera un producto, sino que creara un vínculo real con su audiencia a través del entretenimiento y la cercanía.
Solución: Personajes que cuentan historias
Convertimos cada producto en un personaje con personalidad propia, dotando a la marca de un tono irreverente y cercano. Bajo una narrativa visual y verbal divertida, desarrollamos contenido animado que no solo promociona los productos, sino que genera identificación con la audiencia. Chewzme no solo ofrece golosinas, crea momentos memorables y conversaciones que conectan con la cultura de su público objetivo.